martes, 26 de abril de 2011

Árboles que "hablan" de Buenos Aires

Desde ayer se exhiben, en la Plaza de la República, gigantografías de los ejemplares emblemáticos porteños



Bajo su sombra, el general José de San Martín firmó el parte de victoria del Combate de San Lorenzo. Hoy sigue en pie en lo alto de la plaza Barrancas de Belgrano un retoño de aquel histórico pino de San Lorenzo, plantado en 1650 en el convento de los jesuitas en la provincia de Santa Fe.

Ese es uno de los 12 árboles que vieron florecer a la ciudad de Buenos Aires como una de las capitales más importantes de América y del mundo. Cuando la actual capital del país era apenas algo más que un pueblo con 40.000 habitantes, los pobladores usaban estos árboles para ubicarse geográficamente.

Sobrevivieron más de 200 años, y una iniciativa oficial busca no sólo que se los reconozca, sino también que los vecinos puedan conocer sus historias. Por eso, ayer comenzó una muestra itinerante del patrimonio arbóreo porteño en la Plaza de la República. Habrá gigantografías que mostrarán el higuerón del parque Lezama, el gomero de la Recoleta, el aromo del Perdón, en Palermo, y otros.

Cuatro de los 12 fueron declarados Patrimonio Histórico Nacional. "De Parque Patricios a Belgrano, de San José de Flores a la Recoleta, estos árboles encarnan algunas de las joyas naturales que ofrece la ciudad", dijo Javier Corcuera, presidente de la Agencia de Protección Ambiental, quien junto con Diego Santilli, ministro de Ambiente y Espacio Público, organizó esta muestra que recorrerá Buenos Aires durante todo el año.

En el agitado 2001 el historiador Félix Luna escribió en la sección Cartas de lectores en La Nacion: "Hasta la semana pasada estaba mustio y melancólico. Parecía enteramente muerto. Pero ahora el lapacho que plantó Martín Ezcurra en la esquina de Mariscal Castilla y la avenida Figueroa Alcorta ha empezado a florecer. Pronto el colorido de sus campanillas iluminará ese lugar. Celebremos estos brotes de vida. Y hagámoslo imaginando que es una metáfora del país".

Ese lapacho es sólo uno de los árboles que siguen en pie en la ciudad de Buenos Aires y encarnan una historia para contar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario